viernes, 4 de diciembre de 2009

Cuatro preguntas sobre el manifiesto

A pesar de compartirlo, no he publicado el manifiesto. A pesar de apoyarlas, no iré a ninguna de las concentraciones. Como Javier, y seguro que como tantos otros, me ha tocado enfrentarme a la polémica de las descargas desde el burladero de la radio, y quizá el haber visto el asunto desde la barrera... haya resultado clave a la hora de hacerme preguntas.

1. La primera era si la autodenominada "Lista de Sinde" representaba realmente a la comunidad digital. Nacho Escolar ya ha respondido.

2. Dice Paloma Llaneza que, a pesar de que los tribunales están descartando los delitos penales, el intercambio de archivos con contenidos protegidos puede constituir un delito civil. ¿No habría hecho falta un poco más de contundencia en el manifiesto... en favor de que los autores puedan comer de su trabajo?

3. ¿Dónde están los autores que apoyan el manifiesto? Seguro que están ahí, en algún sitio.

4. Ayer vi surgir la convocatoria de las concentraciones en Twitter y me asaltaron las dudas. ¿Es tan fácil organizar una propuesta popular?

Dos reflexiones finales y una opinión. La primera reflexión es que, si entre las 500 personas que sigo en Twitter se ha gestado todo el asunto, quizá exista una élite digital. La segunda reflexión es que resulta apasionante haber asistido a una jornada como la de ayer, con una movilización por una causa justa y la consecución de un objetivo. La opinión es que el Gobierno se ha equivocado gravemente.

martes, 1 de diciembre de 2009

Permanezca imbécil, caballero



Las disculpas de Ángel Expósito por la portada con la que ABC nos obsequió el sábado son una clara invitación a la estupidez ciudadana. Toma a sus lectores por tontos y quiere que sigan así. Su medio calificó de asesino a uin hombre... no porque un médico, la policía o cualquier otra fuente lo asegurase: lo hizo porque ABC se saltó a la torera los mecanismos del Estado de Derecho. Nadie es culpable de nada hasta que lo dice un juez. No valen paños calientes, y por tanto no valen sus disculpas. Los medios de comunicación cometen [cometemos] muchos errores, y disculparse es sanísimo, pero lo que ha hecho Expósito ha sido escurrir el bulto.