martes, 16 de octubre de 2007

...y de Fiji a Gernika, pasando por Weimar

El Ejército de Fiji está pasando por serios apuros económicos. Su presupuesto para el año 2007 ha tenido que sufrir muy drásticos recortes: no dan para más, no llegan a fin de mes... Y los dilectos lectores se preguntarán: ¡Oh, cielos! ¿Qué penalidades afligen a los aguerridos militares fijianos? Sencillo. Han cargado sobre sus espaldas la difícil tarea del poder. Dieron un golpe de Estado hace menos de un año, y claro, ahora los soldados tendrán que cobrar 2 dólares fijianos y medio al día... en lugar de 7. ¡El rancho tendrá que reducirse a al mitad! No contaban con la presidencia, con los ministerios, con las subsecretarías, con la dirección adjunta al bedel...

Pero lo que resulta indudable es que en Fiji reina, sobre todo desde diciembre, una extraordinaria placidez. Impera la ley, impera el orden, imperan los fusiles. Como en Birmania. Como en la España de Franco. Todo al gusto de Jaime Mayor Oreja... y de Miguel Ángel Aguilar.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Ayer mientras escuchaba a Miguel Ángel Aguilar en Hora 25 me acordaba de mi abuelo....Cada vez que llegaba Franco a la ciudad, a la cárcel. Era un hombre peligroso. Había sido jefe de obras del Ayuntamiento durante la República. Ser albañil, su único delito...Por cierto, Mayor Oreja está viviendo una involución preocupante. Delirante más bien. Mayor Oreja formaba parte de la UCD que en el País Vasco dio una más que cordial bienvenida a la democracia a los poli-milis cuando abandonaron ETA. Y ahora míralo. Es como ese Xabier Arzalluz que presionado por un sector de su partido no pudo votar sí a la Constitución, a pesar de que la consideraba un logro político y que luego ha acabado cazando mariposas con rh negativo.Las vueltas que da la vida...