Las miradas y los momentos [II]

No había advertido su entrada en el auditorio, y sólo cuando Moeh me ha hecho notar su presencia en uno de los laterales de la sala, he reparado en el director de ABC. Durante la mesa redonda El Ala Oeste de los Dilemas, en el edificio CaixaForum de Madrid, varios de los ponentes han aludido a la espantada de Eduardo Zaplana como... digamos... un curioso ejemplo del paso de la política a la empresa. Entonces, Ángel Expósito ha llamado la atención de los presentes sobre otro caso que había trascendido sólo unas horas antes: el salto de David Taguas desde la Oficina Económica de Moncloa a la patronal de la construcción. "Si hablamos de Zaplana" -ha dicho Expósito- "justo será que lo hagamos también de Taguas". Tras la acertada reflexión ha tomado la palabra Enrique Guerrero, ex Subdirector del Gabinete de la Presidencia del Gobierno [ex desde el martes]. Y Guerrero, bregado en mil batallas, ha mostrado un papel con dos nombres. "Miren, aquí tenía yo escritos los nombres de Zaplana y de Taguas. Yo sabía que si hablaba de Zaplana, tendría que hablar también de Taguas. Por eso en mi intervención... no he mencionado a Zaplana". Y ha sonreído. Y muchos de los asistentes, también. Sólo unos minutos antes, Guerrero había dedicado su intervención a glosar cómo el Gobierno... sin necesidad de mentir... nunca revela toda la verdad en sus respuestas a los periodistas.

Con Taguas, nuestra colección de miradas se amplía. Hagan juego, señores.